Bosquejo
nono. “Cristo
crucificado” (1635). Zurbarán. SALA X (Planta alta)
El
sentido de la existencia humana. Las creencias
APRENDE
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Pintura barroca de la Escuela sevillana, representa sobre fondo negro y con cuatro clavos, a Cristo crucificado sobre cruz arbórea, con un sudario blanco que resalta con intensidad. Cristo se apoya en un suppedaneum, que impedía una muerte rápida y prolongaba la agonía, siguiendo el consejo de la monja sueca Santa Brígida a partir de sus visiones.
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Zurbarán, extremeño de Fuente de Cantos, pintor del siglo de Oro español (siglo XVII). Artista que destaca en pintura religiosa, representativo de la Contrarreforma. Destaca por su gran fuerza visual y profundo misticismo.
REFLEXIONA
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Horror vacui. Uno de los grandes misterios que rodean al ser humano. ¿Qué sentido tiene nuestra propia existencia? El miedo al vacío, nada más horrible que la nada (el absurdo), que nuestra propia existencia carezca de sentido. Diferentes corrientes filosóficas han defendido esta posición (el existencialismo, Camus, Sartre, Cioran).
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El sentido de la propia existencia puede hallarse en propio existir, explicación inmanente. Quien así lo concibe desarrolla una filosofía del heroísmo, a pesar de la incertidumbre. El hombre, en tanto que ser racional, está obligado a proceder en su vida diaria como corresponde a un ser dotado de dignidad y libertad. Como decía carlyle, sólo nos quedará esto: “El último evangelio de este mundo es: <conócete tu obra u cúmplela>”.
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Explicación trascendente del sentido de la propia existencia. Todas las religiones monoteístas abrazan esta interpretación. La pintura de Zurbarán propone el gran símbolo de la redención para el Cristianismo. El creyente se pregunta: ¿Se puede ser feliz sin esperanza?
AISTHESIS
(Deleite) ¿Cómo vemos? Fondo y forma.
- Si lo piensas, el fondo de este cuadro es solo oscuridad, es una pared, es algo neutro. Ver no es lo mismo que mirar, cuando miramos algo, o a alguien, lo que queda alrededor es el fondo, y el objeto que miramos es la forma. Así es la naturaleza de nuestra visión.
- Los pintores conocen cómo vemos y utilizan estos conocimientos para producir efectos en el intelecto del espectador. Cristo no murió en un espacio con una pared detrás, sino en un monte, así que esta recreación de Cristo en la Cruz que hace Zurbarán no refleja completamente lo que de verdad pasó, porque elimina todos los elementos del paisaje (el fondo), y así le da mayor importancia a los elementos que componen la figura de Cristo (la forma), como: su cuerpo desnudo, la luz que le invade, la sangre o el hecho de que tenga la cabeza hacia abajo.
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